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Para muchos clientes bancarios, la mayoría de los viajes a una sucursal local ofrecen la opción de hablar con un cajero bancario o usar un cajero automático o cajero automático. Los cajeros automáticos son comunes en áreas pobladas, proporcionando una fuente de efectivo y otros servicios bancarios. Sin embargo, también hay razones por las que los bancos siguen empleando cajeros, de los cuales solo uno es el toque humano.
Historia
Los cajeros bancarios han estado brindando servicios bancarios durante tanto tiempo como los bancos. Sólo sus obligaciones han cambiado con el tiempo. Los cajeros automáticos aparecieron por primera vez en la década de 1960 y se propagaron rápidamente, convirtiéndose en una característica estándar de casi todos los bancos estadounidenses para la década de 1990. La tecnología informática ha permitido a los bancos agregar funciones y funciones de seguridad adicionales a los cajeros automáticos. Hoy en día, hay cerca de 370,000 cajeros automáticos en los Estados Unidos, según el corresponsal de tecnología de MSNBC, Bob Sullivan.
Funciones
Muchos bancos emplean cajeros que manejan transacciones básicas, y asociados de nivel superior que ayudan a los clientes a abrir cuentas y manejar transacciones más complejas. Los cajeros pueden cobrar cheques, hacer depósitos y retiros, proporcionar información sobre el saldo de la cuenta y emitir giros postales. Los cajeros automáticos sirven para muchas de las mismas funciones, aceptando cheques y dinero en efectivo para depósitos, mostrando información de la cuenta y, lo más popular, emitiendo efectivo.
Conveniencia
Uno de los principales factores que distingue a los cajeros automáticos de los cajeros de los bancos es el nivel de conveniencia que ofrece cada uno. Para realizar una transacción con un cajero bancario, un cliente debe ir a una de las sucursales de ese banco y esperar en la fila un cajero disponible. Los cajeros automáticos, por otro lado, se extienden sobre un área geográfica mucho más amplia. Además de las ubicaciones en los vestíbulos de los bancos, muchos bancos ofrecen cajeros automáticos en las aceras, en las tiendas y en las ventanillas bancarias para acelerar el proceso de transacciones simples.
Servicio al cliente
Los clientes del banco que prefieren usar un cajero humano a menudo citan el servicio al cliente superior. Si bien los cajeros automáticos eliminan algunas de las oportunidades de error humano, pueden ser difíciles de usar, especialmente para los clientes que no están familiarizados con las interfaces de computadora. Los cajeros bancarios pueden responder preguntas y ofrecer asesoramiento sobre posibles soluciones a las necesidades bancarias de un cliente. Una de las ventajas de los cajeros automáticos es que las máquinas a menudo funcionan en varios idiomas, lo que brinda a los clientes que no hablan inglés una forma más fácil de completar una transacción.
Costo
Otra diferencia importante entre cajeros automáticos y cajeros es el costo. Proporcionar salarios y beneficios a los cajeros le cuesta mucho más a un banco que instalar un cajero automático, que puede costar más inicialmente pero funciona las 24 horas del día. Debido a la conveniencia adicional, muchos bancos instalan cajeros automáticos en cada sucursal, mientras siguen empleando a varios cajeros para darles a los clientes una opción. Al manejar la mayoría de las transacciones pequeñas, los cajeros automáticos le ahorran a los bancos una cantidad significativa de dinero y también ayudan a atraer nuevos clientes que consideran que la conveniencia de cajeros automáticos es atractiva.