Tabla de contenido:
- Gastos finales
- Reemplazo de la Seguridad Social y Beneficios de Pensión
- Reemplazo Salarial
- Vehículos de inversión
- Beneficios fiscales
Una póliza de seguro de vida es una póliza que las personas contratan con una compañía de seguros de vida para proporcionar una suma de dinero cuando mueren. Las pólizas de seguro de vida están diseñadas para lograr varios objetivos. Esto incluye cubrir los gastos finales de la persona, como los costos de los funerales y servir como un colchón financiero para los miembros de la familia para evitar dificultades financieras. Otros propósitos incluyen servir como posibles vehículos de inversión y ayudar con la planificación del impuesto a la herencia.
Gastos finales
Morir puede llevar a gastos inesperados. Estos pueden incluir los costos de un ataúd, la compra de un solar funerario y el costo de una sala de alquiler para mantener un velatorio. Una póliza de seguro de vida puede ayudar a cubrir la mayoría y posiblemente todos estos costos.
Reemplazo de la Seguridad Social y Beneficios de Pensión
Cuando usted muere, sus familiares sobrevivientes pueden dejar de ser elegibles para beneficios de jubilación, como cheques de seguridad social o beneficios de pensión. Una póliza de seguro de vida puede pagar suficiente dinero a sus sobrevivientes para compensar esta pérdida de ingresos.
Reemplazo Salarial
La muerte de una joven ganadora primaria puede crear inseguridad financiera para una sobreviviente, especialmente si tiene hijos pequeños y le resultaría difícil ingresar a la fuerza laboral. El seguro de vida puede proporcionar a un padre sobreviviente la capacidad de demorar o evitar el ingreso a la fuerza laboral.
Vehículos de inversión
Ciertas formas de seguro de vida pueden ofrecer beneficios financieros a los asegurados incluso si aún viven. El titular de una póliza compra una póliza de seguro de vida completa y usa el capital obtenido para pedir prestado en tiempos de dificultades financieras.
Beneficios fiscales
Las pólizas de seguro de vida generalmente se consideran ingresos no gravables. Esto significa que cualquier dinero pagado no generará impuestos estatales, locales o federales. La compra de una póliza de seguro de vida puede ser parte de la planificación patrimonial esencial.