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Anonim

Los gobiernos imponen impuestos a una variedad de transacciones económicas, incluidos los ingresos obtenidos de fuentes tales como salarios, salarios, autoempleo, intereses y dividendos, para recaudar fondos para continuar sus operaciones. El impuesto a la renta proporciona a los gobiernos una fuente vital de ingresos, pero puede tener un impacto perjudicial en el crecimiento económico porque tiende a reducir la demanda de bienes y servicios en la economía. La demanda agregada es un término comúnmente utilizado en economía, que se refiere a la demanda total de bienes y servicios en una economía.

La demanda agregada determina la tasa de crecimiento de la economía

La demanda agregada es un factor importante para determinar la tasa de crecimiento de una economía: cuando las personas demandan más bienes y servicios, las empresas obtienen más ingresos y es más probable que se expandan y contraten más trabajadores, lo que lleva al crecimiento económico. Cuando la demanda agregada es baja, las empresas tienden a ganar menos dinero y pueden despedir trabajadores o reducir su tamaño en un esfuerzo por reducir los costos, lo que lleva a una desaceleración del crecimiento económico o una contracción económica.

Impuestos sobre la renta y la demanda

Cuando las personas tienen menos ingresos disponibles para gastar en bienes y servicios, esto lleva a una menor demanda agregada. Dado que los impuestos a la renta le quitan dinero a los consumidores, tienden a disminuir la demanda agregada. Por ejemplo, este año tuvo que pagar 10% más en impuestos sobre la renta que el año anterior, pero su ingreso total se mantuvo igual, le queda menos dinero para gastar en cosas como entretenimiento, ropa, restaurantes y viajes.

Recortes de impuestos

Los gobiernos comúnmente emplean recortes de impuestos como un medio para aumentar la demanda de los consumidores y estimular la actividad económica. Por ejemplo, a fines de la década de 2000, el gobierno de los Estados Unidos introdujo una variedad de incentivos fiscales, como los créditos fiscales para nuevas viviendas y vehículos, en un intento por aumentar la demanda y el crecimiento económico.

Consideraciones

Los cambios en los ingresos pueden tener diferentes impactos en la demanda de bienes. Las personas tienden a comprar ciertos bienes que consideran necesidades sin importar sus ingresos. Por ejemplo, es posible que no compre significativamente menos leche o gasolina, incluso si tiene menos dinero para gastar cada mes debido a impuestos más altos. Por otro lado, los consumidores pueden estar más dispuestos a recortar los lujos como las vacaciones caras, comer en restaurantes de lujo y comprar ropa de diseñador con sus presupuestos. En otras palabras, los impuestos sobre la renta más altos pueden perjudicar a las empresas que venden bienes y servicios no esenciales más que otros.

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