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El Seguro de Discapacidad del Seguro Social ofrece beneficios de discapacidad para las personas que no pueden trabajar durante al menos 12 meses debido a una condición de discapacidad. Como las personas que solicitan el SSDI no pueden trabajar, a menudo tienen problemas para pagar sus facturas mientras esperan que el Seguro Social apruebe su solicitud de beneficios. A muchas personas no les gusta pedir ayuda, pero este no es el momento para dudar.
Paso
Visite su oficina de asistencia social y solicite beneficios como asistencia en efectivo, Medicaid y cupones de alimentos. El nombre de la oficina varía de estado a estado, pero a menudo se llama algo así como el Departamento de Servicios Humanos o el Departamento de Servicios Sociales. Mientras esté allí, pregunte si los funcionarios pueden dirigirlo a otras agencias o servicios que puedan ayudarlo con las facturas.
Paso
Comuníquese con todos sus acreedores y explíquele que se ha discapacitado y pregúnteles si pueden hacer algún tipo de plan de pago para usted que implique pagos mensuales reducidos. Algunos lo harán y otros no. En algunos casos, el pago reducido aún puede ser más de lo que puede pagar, pero podría ayudarlo.
Paso
Comuníquese con agencias de servicios sociales como United Way y Salvation Army y pregunte si pueden ayudarlo con algo. Las iglesias también pueden ayudar. A veces le ayudarán a pagar las facturas de servicios públicos u otras facturas. Si no pueden ayudar, pregunte si conocen a alguien que pueda.
Paso
Comuníquese con su compañía de gas, compañía de electricidad y compañía telefónica, explíquele la situación y pregúntele si pueden orientarlo hacia alguna agencia o servicio que pueda ayudarlo a pagar esas cuentas.
Paso
Pregunte a sus amigos y familiares si pueden ayudarlo con las facturas. Puede tomar muchos meses para que el Seguro Social revise su caso y tome una decisión, y es difícil mantenerse y pagar las facturas durante ese tiempo.