Tabla de contenido:
Si está planeando su futuro financiero, necesita comprender los diferentes tipos de planes de jubilación. Un plan de jubilación no contributivo suele ser financiado únicamente por el empleador. Con un plan de jubilación contributivo, el empleado paga una parte de su salario base regular en el plan de pensión.
Planes de pensiones
Con un plan no contributivo o de beneficios definidos, el empleador se compromete a pagar en el futuro una cantidad que se basa en la tasa de pago y el número de años con la compañía. El pago final de la pensión se basa en la edad, la salud y el número de años antes de que el empleado se jubile.
En un plan de pensión contributiva, el empleador y el empleado pagan al programa. Los porcentajes de contribución están establecidos por los términos descritos en el plan de pensiones.
Beneficios
Uno de los beneficios de un plan no contributivo es que el jubilado garantiza una cantidad específica, generalmente cuando cumple los 65 años. Los beneficios del plan se pueden acumular en un período corto.
Con los planes contributivos, los empleadores pueden aportar un porcentaje o igualar los montos en dólares que el empleado ha invertido en el plan. Las contribuciones a dicho plan se pueden hacer a través de deducciones antes de impuestos de nómina, lo que permite al empleado reducir las ganancias gravables sobre los ingresos.
Consideraciones
Los planes no contributivos son costosos y complejos. Para los planes contributivos, el monto total que el empleado puede aportar al fondo de pensiones se define anualmente mediante el Código de Ingresos Internos, y los beneficios pueden aumentar o disminuir, según las contribuciones realizadas y la volatilidad del mercado de inversión.