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El Servicio de Impuestos Internos le permite deducir los costos de la compra y el mantenimiento de la ropa de trabajo en su declaración anual de impuestos si su empleador no le reembolsa. La ropa debe ser específicamente requerida por el empleador y no ser adecuada para el uso diario. Entre aquellos cuyos gastos de vestimenta podrían calificar están los oficiales de policía, bomberos, trabajadores de la salud, carteros, artistas teatrales y trabajadores del transporte. La ropa de protección requerida, como botas de seguridad, cascos y guantes, también son deducibles. Los gastos relacionados con la ropa que se puede usar fuera del trabajo para fines cotidianos no se pueden deducir.
Reclamación de gastos no reembolsados
Los gastos por la ropa de trabajo y los uniformes que exige su empleador y que no son adecuados para el uso diario generalmente se deducen en el Anexo A (Formulario 1040), línea 21, o en el Anexo A (Formulario 1040NR), línea 7. Estos gastos se consideran deducciones misceláneas detalladas, pero solo se pueden deducir si el total de todos los gastos diversos supera el 2 por ciento de su ingreso bruto ajustado. Guarde todos los recibos para las compras y el mantenimiento de su ropa relacionada con el trabajo, como la limpieza en seco y la adaptación.