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Los estados financieros armonizados utilizan prácticas contables internacionalmente estandarizadas y un formato de informe uniforme para presentar la información financiera de una empresa en cualquier país del mundo. El propósito de esto es facilitar las comparaciones financieras entre compañías en diferentes países y mejorar la administración y la toma de decisiones con respecto a los recursos financieros globales. El objetivo final es maximizar el potencial de la economía mundial. El Consejo de Normas Internacionales de Contabilidad, el órgano normativo de la Fundación Internacional de Normas Internacionales de Información Financiera, ha liderado la iniciativa para crear normas internacionales de contabilidad desde 1973. A pesar de los beneficios evidentes, también existen varios desafíos y desventajas. Armonizar los estados financieros.
Diferencias culturales
Una de las críticas de las normas contables armonizadas es que el IASB no ha tenido en cuenta plenamente las diferencias culturales, políticas y sociales entre los países. Esto es particularmente relevante para su implementación en países en desarrollo, donde las barreras del idioma, las actitudes hacia la contabilidad y otros aspectos socioculturales pueden afectar su interpretación y aplicación. Por ejemplo, cuando las normas armonizadas se implementaron en Jordania, primero se tradujeron al árabe. A pesar de que los términos de contabilidad técnica han sido bien definidos en árabe, surgieron desafíos cuando la terminología en inglés era difícil de interpretar o utilizar de manera inconsistente y, por lo tanto, difícil de traducir con precisión.
Aceptación mundial
Las normas contables nacionales están muy politizadas y, a menudo, existe una tendencia natural a situar los intereses de la economía nacional por encima de los de la economía mundial. Las empresas del sector privado y los organismos contables profesionales también tienen un gran interés en las prácticas contables y la información financiera. La presión de estos grupos para cambiar o rechazar ciertos estándares puede tener mucho peso para quienes toman las decisiones políticas. La adopción de estándares financieros internacionales se enfrenta a desafíos adicionales en los países en desarrollo. A menudo carecen de los recursos y la infraestructura para adaptar los marcos legales y legislativos nacionales para albergar las normas, lo que dificulta la implementación adecuada.
Cumplimiento Internacional
El éxito de la información financiera armonizada depende de que los gobiernos individuales hagan cumplir el cumplimiento de las normas internacionales una vez que se hayan implementado. En 2008, las autoridades francesas permitieron que el banco Société Générale transfiriera algunas de sus pérdidas de 2008 a 2007, lo que significa que su estado financiero para 2008 parecía mucho mejor que la realidad. Esto provocó una protesta internacional, no la menor desde el IASB. Cuando se hacen excepciones, socava la integridad de todo el sistema y lo hace ineficaz.
Entrenamiento y Reentrenamiento
Cuando un país decide armonizar con las normas internacionales, sus empresas, contadores y auditores deben recibir una nueva formación en las nuevas normas y procedimientos de presentación de informes para los estados financieros. Los programas universitarios y universitarios en este campo también deben sufrir cambios significativos para educar a nuevas personas que ingresan a la profesión. Antes de que esto suceda, los capacitadores y profesores necesitarán capacitación para que puedan instruir a profesionales y estudiantes. Esto requerirá el desarrollo de nuevos materiales de aprendizaje y planes de estudio, nuevos exámenes para la obtención de licencias profesionales y un nuevo software de contabilidad y sistemas de informes. Para complicar aún más las cosas, la adopción de normas armonizadas debe ser gradual, por lo que durante varios años, dos sistemas diferentes están en funcionamiento. Una transición tan compleja requiere muchos mecanismos de seguridad para garantizar que logre resultados uniformes.